Una escopeta dedicada a un público más deportivo y refinado, que ama el «reto» de los calibres pequeños y che aprecia las líneas esbeltas y las características dinámicas de esta arma semiautomática. Su elegancia deriva de las formas y de los acabados así como de la decoración, sin duda alguna rebuscada, con al centro una luminosa alegoría del calibre 28. Un espléndido calibre para disfrutar con tus nuevos retos.